lunes, 16 de marzo de 2009

Nacionalización, el tema de moda

Los "sunday papers" de hoy, como decía nuestro amado Joe Jackson en su canción, han estado dándole vueltas al asunto de la nacionalización (o pre-privatización, como dicen en los USA) de la Banca.

En El País Negocios (que a pesar de ser el boletín oficial del Gobierno, es de lectura obligatoria y, en muchos casos, placentera) de hoy se han explayado a base de bien con el tema, contando los casos de Islandia, Bélgica, Alemania, USA y Reino Unido y haciendo una labor prospectiva y creadora de opinión sobre lo que pueda pasar en España.

Y, tan espectacular y radical como de costumbre, en El Confidencial de hoy Jesús Cacho hace una disección de la solvencia del sistema llegando a una conclusión escalofriante: para una posible morosidad de 287.000 millones de euros el sistema cuenta con una capitalización de 173.000 millones, y cuenta cómo hay diferentes tendencias en el PSOE para afrontar el problema, tendentes a mantener las medidas actuales o, directamente, nacionalizando al sector y dejando vivos a los menos afectados.

En los USA parece que va a ser inevitable la nacionalización total de los grandes (BofA, Citi), como está pasando en el Reino Unido (RBS, Lloyds/HBOS) o están preparando en Alemania (Hypo Real Estate).

La contabilización anglosajona, que obliga a contabilizar "mark-to-market" cada trimestre, ha hecho que en estos países afloren más rápidamente los activos tóxicos, los créditos morosos y las pérdidas; en España, con nuestro negocio más tradicional, nuestras benditas provisiones genéricas y el empeño sectorial en minimizar el ratio de morosidad hasta que sea imposible sujetarlo, esto no pasa. Llevamos más de un año sosteniendo a clientes sin futuro, por el simple hecho de que nuestras cuentas sigan saliendo decentes o, al menos, por debajo de la media.

Esta situación, como hemos dicho repetidas veces en MacroVistazo, es insostenible, pues no podemos seguir transformando nuestros balances a base de compras de activos improductivos, de valor incierto, comprados en base a tasaciones que se ajustan a nuestras necesidades y que, sin generar ingresos, tiene gastos de mantenimiento elevados. Y tampoco se puede seguir engordando la pelota crediticia renovando financiaciones imposibles a clientes sin ingresos y sin perspectivas de tenerlos en el medio plazo, y a los que tenemos que financiar hasta los intereses para que no casquen.

Es claro que esto tiene que llegar a algún final. La situación económica cada vez es más complicada (hasta el flamante Nobel Krugman lo dice y habla de nosotros, supongo que no por interés propio, sino aprovechando algunos "bolos" que le han salido por aquí: hay que aprovechar la racha para ganar pasta), y en algún momento tendremos que reconocerlo. No sabemos si los ratios de morosidad reales son del 9 o del 25% (por experiencia propia, nos situamos en el 10% real en este momento) , lo que si sabemos es que no se podrán contener eternamente.

Y en ese momento, el Estado, como accionista de último recurso, interesado en mantener vivo al sector para que éste mantenga vivos al resto de sectores, tendrá que entrar en juego. En MacroVistazo no sabemos cómo ni cuándo, pero no lo dudamos.

No hay comentarios: